Ingresando a nuestras adolescencias, atravesamos la democracia interrumpida por Onganía y sucesores, la Patria alzada en el Cordobazo, la celebración de una democracia con Cámpora y Perón, luego nuevamente interrumpida por el golpe genocida. Fuimos testigos de esas travesías, ya portando sueños y banderas. Regresó la democracia y en nuestros caminos se alumbró la canción. Soñar un destino de la Patria conduce a un mañana y a un ayer. Mirando ese ayer, nos da tanto dolor como alegría. Eso se tradujo en palabras y sonidos. En Mojones. Liliana, Teresa y Juan |